473.- Venía de los cursillos de Trial y Cross que organizaba Josep Isern, pero a mí me gustaba dar gas y no paré hasta que mi padre, allá por el 1974, con 13 años, me compró una Pursang 125 de segunda mano.
Recuerdo que el motor no aguantaba y se rompía con facilidad, aunque quizás era yo el que la apretaba demasiado, pero mi padre se hartó de repararla y la vendió sin más, finalizando mi etapa en el Motocross.
Ahora, digitalizando las fotos de Juan Luis Gaillard, han aparecido las del que fue mi modelo, la Bultaco Pursang MK7 125 de 1973 modelo 117 y por eso me he emocionado.
Tanto mi padre como mi hermano la tunearon. Le cambiaron los colores, le pusieron guardabarros de plástico amarillo, veo una corona inmensa y también adelantaron los amortiguadores como la MK8.
No tengo demasiadas fotos con ella, pero sí recuerdo que, aunque me duró poco, lo pasé genial y me permitió rodar en los circuitos del Vallès, Esplugues, Cerdanyola y Can Rabella de Rubí, entre otros.
Estas fotos son entrenando en un circuito privado que nos dejaban en La Floresta (Sant Cugat).